sábado, 29 de enero de 2011
En las nubes
Vi escorpiones, vi al fénix y a América del sur en el cielo,
vi las nubes y la oscuridad en un pestañear de lágrimas,
como se dividían y esparcían los munditos celestiales,
y al ver tanto quise cerrar los ojos
pero todo seguía permaneciendo aunque el viento borrara al tiempo,
si hasta los ciegos imaginamos que el corazón ve por nosotros
si hasta los escorpiones en nubes duelen al mirarlos
como la américa dividida ante el holocausto
el fénix que ya no me renace,
como me difumino en una nube también,
se me están desarmando los rulos,
se me están dispersando los miedos
y todas esas maravillosas cosas
que siempre consideré guardadas,
desde lo más profundo de todo
a lo más superficial de esta nada.
las vi también irse en una nube
de esas que jamás se alcanzan.
miércoles, 12 de enero de 2011
Open my eyes... al viento.
En algún momento se te queman los huesos con el frío,
se te congela la sangre de tanta soledad, decepción y abandono,
a veces pronto casi tan encima que no puedes reaccionar,
me gustaría no sentir éste estrujamiento del estómago,
ni la soledad de la muerte prematura de mi alma desahuciada,
como si me hubiesen carneado el corazón y todo sentimiento esperanzado, no soy ni la primera ni la última con la desazón de un enunciado de botadero simple,
pero me duele, me cortan las lagrimitas de cristal caído,
las venas me hablan del silencio permanente de su ser,
que se me carcoma la desilusión de un golpe fijo, ojalá claro.
No volveré...
se te congela la sangre de tanta soledad, decepción y abandono,
a veces pronto casi tan encima que no puedes reaccionar,
me gustaría no sentir éste estrujamiento del estómago,
ni la soledad de la muerte prematura de mi alma desahuciada,
como si me hubiesen carneado el corazón y todo sentimiento esperanzado, no soy ni la primera ni la última con la desazón de un enunciado de botadero simple,
pero me duele, me cortan las lagrimitas de cristal caído,
las venas me hablan del silencio permanente de su ser,
que se me carcoma la desilusión de un golpe fijo, ojalá claro.
No volveré...
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